No sé de segur, si hagués de descriure’m amb una sola paraula, quina triaria, peró puc jurar que no seria “patriòtic”. No va d’una vegada ni de dues que em miren mal a l’esglèsia, als concerts, a les conferències: no comulgue a les bodes, no em pose d’empeus quan les bandes toquen l’himne de
Se m’escapa el riure, ho admet, quan encara sent parlar d’Almansa, quan veig cartells pegats per les façanes fent referència als decrets de Nova Planta de Felip de Borbó. Se m’escapa el riure, i no vull amb aixó molestar a ningú, quan sent parlar de nacionalisme, de defensa de la llibertat. ¿Acás la llibertat és més amplia quan més estret és l’espai que habitem? ¿Es que per ser menys, serem millors?
“El teu païs són els teus amics”, diu Martín pare al genial film Martín (Hache). Potser jo soc en certa manera independentista, pero si clame per la llibertat és per la meua própia, per una llibertat espiritual, profunda, significativa. Jo no esdevindria millor persona, ni un ciutadà més feliç, si cambiaren innecessàriament les lleis del lloc on em toca viure, o si aquesta llengua fos la única oficial. I es que jo no em sent espanyol, com diuen molts nacionalistes convençuts, peró, collons de Deu, tampoc em sent valencià. Ni alacantí, ni pinoser, ni campeller. Ni segovià, ni cuellarenc, ni asturià, ni murcià… I no sé seguir remontant-me als meus orígens familiars. Ni ho necessite. La meua identitat no l’he de buscar a la terra que habite, sino en mi mateix, en l’alé del meu cor sempre exrtranger, sempre deportat.
En quant a la llengua… ¿qué podria dir? D’igual manera que els vascos o els gallecs, per naturalesa parle una llengua més que la majoria d’espanyols. Done gràcies per aquest regal. Em sent ple de joia per poder llegir en versió original a senyors com Ferran Torrent, Quim Monzó, Pere Calders, Josep Pla, Santiago Russinyol, Vicent-Andrés Estellés… ¿Com de llarg voleu l’etcétera? I no comprenc la gent que porta generacions vivint ací i encara no ha tractat d’accedir a aquest privilegi, no entenc que no matriculen als seus fills a la línea PEV, no entenc que no vagen a l’escola nocturna per tal d’aprendre encara que siga només a comprendre la llengua. Ara bé, igual puc fotre’m d’ells que dels cretins que es fan traduïr el Quijote al català, l’amonen Quixot i es queden tan panxos; o el diputat català que s’empenya en parlar-ne a les corts de Madrid.
Així doncs, jo he trobat un camí cap a la independència, que potser resulta una mica més pacífic, i menys invasiu, per als meus veïns. Me cague en totes les banderes, i me pixe en totes les fronteres, i m’importa una merda en quin idioma he de dir-li a un imbécil que se’n vaja a prendre pel cul. Tracte de no sentir mai himnes nacionals, comarcals, o locals: el músic que composa un himne de manera conscient és una puta, o pitjor, es un xulo que explota i extorsiona la seva música.
A mí no m’importa, doncs, si els catalans han adoptat o no el Cant dels Ocells com a himne “nacional”, ni m’importa si són nació o estan en procés de ser-ho. M’importa, aixó sí, saber que ningú pot negar-me el dret d’adoptar el Cant dels Ocells com a himne de la meua ánima, perque aquest és, amics i amigues, un llenguatge que tots podem comprendre.
Abaix, Youtube de la versió de Pau Casals al violoncel, amb acompanyament de piano.
(En castellano)
No estoy seguro, si debiera describirme con una sola palabra, de cual escogería, pero puedo jurar que no sería “patriótico”. No va de una vez ni de dos que me miren mal en la iglesia, en los conciertos, en las conferencias: no comulgo en las bodas, no me pongo en pie cuando las bandas tocan el himno de la Comunidad (ni del pueblo tampoco). A menudo los forasteros han desaprobado mi defensa de la lengua valenciana; más a menudo aún, los valencianos me han despreciado por no fanatizar mi defensa. Puede que, en el polémico terreno de la identidad de los pueblos, de las lenguas, me encuentre en eso que acostumbramos a llamar tierra de nadie. Y reconozco que no me importa nada. Me la suda quién trate de convencerme de qué, me la suda de qué lado estiran la cuerda. No obstante, se trata del cercano 9 de Octubre, día de la Comunidad, y por lo tanto es de mis compatriotas de quienes quiero hablaros.
Admito que se me escapa la risa cuando aún oigo hablar de Almansa, cuando veo carteles pegados por las fachadas haciendo alusión a los Decretos de Nova Planta de Felpie de Borbón. Se me escapa la risa, y con esto no quiero molestar a nadie, cuando oigo hablar de nacionalismo, de defensa de la libertad. ¿Acaso la libertad es más amplia cuanto más estrecho es el espacio que habitas? ¿Es que por ser menos, seremos mejores?
“Tu país son tus amigos,”, dice Martín padre en el genial film Martín (Hache). Quizá yo soy, en cierto modo, independentista, pero si clamo por la libertad es por la mía propia, por una libertad espiritual, profunda, significativa. Yo no sería mejor persona, ni un ciudadano más feliz, si cambiaran innecesariamente las leyes del lugar donde me toca vivir, ni si el valenciano fuese la única alengua oficial. Y es que yo nono me siento español, como dicen muchos nacionalistas convencidos, pero, me cago en Dios, es que tampoco me siento valenciano. Ni alicantino, ni pinosero, ni campellero. Ni segoviano, ni cuellarano, ni asturiano, ni murciano… Y no sé seguir remontándome a mis orígenes familiares. Ni lo necesito. Mi identidad no tengo que buscarla en la tierra que habito, sino en mí mismo, en el aliento de mi corazón siempre extranjero, siempre deportado.
En cuanto a la lengua… ¿Qué podría decir? Del mismo modo que los vascos o los gallegos, por naturaleza hablo una lengua más que la mayoría de los españoles. Doy gracias por este regalo. Estoy lleno de alegría por poder leer en versión original a señores como Ferran Torrent, Quim Monzó, Pere Calders, Josep Pla, Santiago Russinyol, Vicent-Andrés Estellés… ¿Cómo de largo queréis el etcétera? Y no comprendo a la gente que lleva generaciones enteras viviendo aquí y aún no ha tratado de acceder a este privilegio, no entiendo por que no matriculan a sus hijos en la línea PEV, no entiendo que no vayan a la escuela nocturna para aprender siquiera a comprender la lengua. Ahora bien, igualmente puedo reírme de ellos que de los cretinos que traducen el Quijote al catalán, lo llaman Quixot y se quedan tan panchos; o del diputado catalán que se empeña en hablarlo en las cortes de Madrid.
Así que yo he encontrado un camino hacia la independencia que quizá resulta más pacífico y menos invasivo para mis vecinos. Me cago en todas las banderas y me meo en todas las fronteras. Y me importa una mierda en que idioma tengo que decirle a un imbécil que se vaya a tomar por culo. Trato de no escuchar nunca himnos nacionales, comarcales, o locales: el músico que escribe conscientemente un himno es una puta, o peor, es un chulo que explota y extorsiona a su música.
A mí no me importa, pues, si los catalanes han adoptado o no el Cant dels Ocells como himno “nacional”, ni me importa si son nación o están en proceso de serlo. Me importa, eso sí, saber que nadie puede negarme el derecho de adoptar el Cant dels Ocells como himno de mi alma, porque este es, amigos y amigos, un lenguaje que todos podemos entender.
Arriba, Youtube con la versión de Pau Casals al cello, con acompañamiento de piano.
13 comentarios:
Algún día los superaremos y vendrá algo peor. Yeah!
Por cierto, sí, son odiosas las hijas de puta y ¡eh! un gallifante para ti, que has adivinado el porqué de plantar ese video. Es que hay que ser muy crack para hacer lo que hace este tipo. Y encima sigue como si nada! Maldito Lars, maldito...
olles, pues que firmamos ai al ladico tullo i acemos nuestras tus palavras, ombre lla!!! con tu permiso, claro ;)
no tenemos mas que anyadir. que lo as dicido todo tan vien...
vesisssss
¿Patria? ¿Qué es eso?
Ah, sí, un motivo más para pelearse :P
Seria de una falta total de respeto tratar de comentar en algo que no es de mi incunvencia, y este tema es algo que nunca lo voy a entender, cosas raras si las hay amigo.-.
Como bien lo sabes soy argentino, y el concepto de comunidades diferentes con diferentes dogmas politicos y sociales, por estos lares no se encuentra mucho.-.
un abrazo amigo y algún dia me interiorizaré mas en el asunto.-.
La primera vegada que escrius en valencià al blog. M'agrada la teua visió...
y el cant dels ocells...pufff aquí no es capaç d'emocionar?
Un beset rabosa!xD ;)
Ohh, Dark Santi, ¿un gallifante? Thank you very much.
Muchas gracias, Ruvias. Tenéis mi permiso para cualquier cosa que se os ocurra.
Justamente, Mis Sinner ^^.
Seguro que tienes cosas más interesantes que hacer, Pay, xD.
Gràcies Jess. ¿Rabosa? xDDDDD.
Yo tampoco entiendo mucho, pero no deja de ser interesante....me gusta tu blog...
uf, cómo me suena todo esto de las patrias. Yo como persona nacida en el país vasco estoy más que cansada de que se me quieran adjudicar unos y otros.
AMEN a lo que dices. Hace tiempo que evitar que me mangoneen viene siendo mi postura aunque, como dices, quede en tierra de nadie
no tengo propiedad suficiente para comentar esto, pero la defensa de la patria creo que ha traído más sufrimiento y dolores de cabeza que alegrías y victorias.
Solo decirte que suscribo lo que dices, y añadir que uno es de donde se siente, y si encima en ese luagr hay gente que le aprecia mucho mejor.
No te respondo en Valenciá porque como bien dice mi amigo Ximo , yo no lo hablo ni lo escribo, lo asesino.
Saludos
Iä Iä
Soy gallego y aquí también pasamos por algo parecido y no puedo sino decirte que estoy totalmente de acuerdo contigo.
La culpa como siempre la tienen los políticos que en vez de enmendar lo que hacen es enmierdar.
Saludos
Muchas gracias, Mujer. ¡Vuelve por aquí cuando quieras!
Se trata exactamente de éso, Imathia. Y gracias pro ese "amén" ^^.
Pues eso mismo, Tan Versátil como acústica, si es que tampoco hay que darle muchas vueltas.
Completamente de acuerdo, Ard. No te preocupes por el valenciano, que si puedes escribir con esa corrección las frases del de Providence, tampoco será pa tanto la lengua d'en Ramón Llull xD.
La verdad que no sé como está el asunto en Galicia, Responsable, pero tienes toda la razón en cuanto a lo de la política.
Disculpad la tardanza en responder, y saludos a todos!
Què?, fent amics, no? jajajajaja!!! Estic totalment d'acord amb tú. Crec que l'important és comunicar-se, no pas en quin idioma es fa. Besets (aquí a Lleida ho diem així).
Publicar un comentario